El reconocido militante, documentalista y escritor Jorge Falcone, de 72 años, denunció que durante la madrugada del domingo 16 de noviembre sufrió una violenta irrupción en su vivienda del barrio Savoia, en City Bell, por parte de cuatro jóvenes que ingresaron alrededor de las 4.30 de la madrugada aprovechando el temporal que sacudía a la región.

Según su propio testimonio, se encontraba medio dormido cuando los delincuentes, vestidos con jogginetas y embozados con bufandas o pasamontañas, lo golpearon y redujeron utilizando una faca y un destornillador. En el interior de la casa, los asaltantes destruyeron muebles, objetos personales y todo lo que encontraron a su paso mientras exigían dólares tras ver su pasaporte.

Falcone explicó que el grupo se llevó alrededor de ocho mil pesos en efectivo y lo obligó, bajo amenazas de muerte hacia él y su perra, a abrir desde su celular la aplicación del Banco Nación. Allí comprobaron que contaba solamente con tres mil pesos. Después de permanecer entre una hora y una hora y media revolviendo el domicilio, escaparon con dos notebooks de trabajo, dos proyectores, una mochila con material didáctico, su teléfono celular y una campera negra de cuero.

El docente jubilado afirmó que no creyó que los agresores estuvieran bajo efectos de drogas, pero remarcó la violencia, la impunidad y el largo tiempo que permanecieron dentro del domicilio. Señaló que posiblemente actuaron sabiendo que vive solo un adulto mayor.

Un barrio que reclama respuestas: otro robo en menos de 24 horas

A la misma preocupación se sumó un hecho ocurrido casi en paralelo: el ingreso de delincuentes a la Biblioteca Popular de Villa Elisa, donde Falcone dicta clases. La institución emitió un comunicado en el que confirmó que sufrió destrozos significativos para ingresar, aunque no lograron llevarse objetos de alto valor.

La biblioteca lamentó el daño económico y emocional causado, advirtiendo que estos episodios recurrentes golpean a un espacio cultural sostenido por vecinos y voluntarios.

La simultaneidad de ambos robos y el tiempo que los asaltantes permanecieron dentro de la casa del documentalista alimentan la hipótesis de una posible zona liberada, especialmente porque resulta inusual que un grupo de delincuentes actúe con tanta tranquilidad, por tanto tiempo y en plena madrugada sin ningún tipo de intervención policial.

El peligroso antecedente político

En redes sociales comenzó a circular un viejo mensaje publicado en 2019 por la actual vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, donde hacía referencia a la familia Falcone. El tuit, que en su momento generó polémica y puede ser visto como una amenaza, volvió a ser mencionado tras el ataque al militante, aunque por ahora no existe ninguna relación comprobada entre aquel mensaje y el violento robo.

Una denuncia que pone la lupa sobre las responsabilidades estatales

En su escrito presentado ante la fiscalía, Falcone manifestó que no espera recuperar sus elementos robados, pero remarcó la necesidad de que su caso deje un precedente que visibilice la escalada delictiva en la zona. También contó que no realizó la denuncia antes debido al intenso estrés post traumático que continúa atravesando.

El violento episodio vuelve a poner en evidencia la situación de vulnerabilidad y desprotección que viven los vecinos del barrio Savoia en City Bell. La responsabilidad política de conducir y garantizar el funcionamiento de la Policía de la Provincia de Buenos Aires recae directamente en el gobernador Axel Kicillof y en el ministro de Seguridad Javier Alonso, así como también en el intendente Julio Alak y en el secretario de Seguridad municipal Diego Pepe, quienes deben explicar por qué bandas delictivas pueden actuar con semejante impunidad y durante tanto tiempo sin ningún tipo de intervención.